sábado, 18 de diciembre de 2010

Necesidad de escribirlo para recordarlo

Con un nervio en la guata, sentimientos que chocan, rebotan y no reconozco, puedo decir que ya me voy de Buenos Aires. Me voy con un cuerpo lleno de sensaciones que no sabia que existían, llena de una felicidad y una pena intenciona, por dejar a la gente que conocí en este lugar y que me dejaron siendo la persona que soy ahora. 
Gracia Brother, gente linda y que no deja de sonreír jamás, gracias por creer en ustedes porque así aprendí a creer en mi misma, gracias por entregar amistad de idiomas distintos y de culturas enormes, gracias por ser más almas que cuerpos y por dejar que les entregara un poco de lo que mi cara no dice siempre. Me llevo un par de palabras que seguramente causarán risa por mis tierras, me llevo personas y risas de las que no pensé ser tan partícipe, me llevo una nueva forma de ver esto y me llevo la forma de disfrutarlo a mi manera. 
¿Cuantas cosas se pueden vivir en un año? las que uno quiera, las que uno sienta la capacidad de sentir. Gracias al del kiosko y a mi conserje por sonreírme a horas que no se sonríe, gracias por el taxista que me quiso estafar, porque me hizo ser más cabrona. 
No puedo dejar de pensar que echaré demenos la humedad del aire y frescura de los brasileros, los Cheetos de queso, el Cepita de manzana y las empanadas tucumanas de la esquina. Como no acordarme de las tardes interminable con mi amigo Tatan y sus locuras, las hipnosis y las cartas, las velas y sus cigarros de tabaco, que se demora más en armar que en fumar. Como no acordarme de mis amigas argentinas, tan distintas y tan parecidas, como no pensar que que mi cabeza está mucho más gorda que antes y llena de vivencias que no se van con un porrazo. Como olvidarme de la clases y de las calles, de los lugares recorridos y de cantar en la calle, como olvidarme de la enseñanza de pensar con la panza y como no sentir la necesidad de seguir en contacto que un país que me recibió de luto y que hoy me despide con más ganas de vivir que una polilla. 
No es que haya madurado es que me hice más persona, un poco más inteligente y más creativa de cosas simples y que le hacen bien al que las quiera escuchar. 
Como no mencionar que fui un poco más amiga de los que no eran mis amigos y un poco menos amiga de las caras largas. Gracias amiga Payo por vivir conmigo y denuevo debo decir que el destino lo hizo mejor! porque me puso en el camino de esta ciudad, este estado mental y estas personas que no olvidaré nunca.
Son parte de lo que soy ahora y che, está buenoooo! volveré pronto, POSTA!

miércoles, 8 de diciembre de 2010

Dice en el diccionario: prudencia, juicio, sentido común

Si yo escribiera con sensatez, escribiría como la gente sensata y como trate de serlo en un momento ya no quiero más sentencias de cabeza, solo quiero escribir más y algo que nunca haya escrito antes, no quiero repetir mis patrones y no quiero ser yo quien tenga que repetirme que me veo haciendo lo mismo y cayendo siempre en la insensatez de querer ser sensata.